martes, 18 de octubre de 2011

Sigilo

El más pequeño de la camada, y con una terrible conjuntivitis que le impedía abrir los ojos (en la foto bastante mejorado). Pero a pesar de ello es el más despierto y valiente, a la par que travieso.

Si bebes no conduzcas

Y si bebes, procúrate un chófer. He de señalar que la foto no tiene retoque. El hecho de que la botella salga tan enfocada debe ser que mi cámara tiene un detector de botellas de cerveza más eficaz que el detector de caras.