sábado, 4 de febrero de 2012

Frío paralizante

Están fríos aquellos cuerpos cuya energía interna es más baja que la de los cuerpos que le rodean. Sus átomos y moléculas se mueven menos, están más quietos. El frío está asociado a la ausencia de movimiento. En fotografía también "congelamos" las imágenes.

El frío siberiano que invade estos días la Península Ibérica ha sorprendido a esta salamanquesa trepando por una helada puerta de metal, y por ello he podido meterle el móvil casi en el ojo, en pleno día, sin que ella pudiera hacer nada para huir. El frío de la puerta ha absorbido el poco calor que tuviera en el cuerpo el reptil, y ha hecho ralentizado aún más su actividad metabólica. Si me la hubiera puesto en la mano, al poco rato habría echado a correr con el calor que le hubiera transferido.

PD: Lástima no haber tenido la cámara "buena" a mano, que le habría hecho unas espectaculares macros.


Bajan las nubes

Fue un día intenso. Hacía días que teníamos programado ir a fotografiar el otoño, pero las previsiones meteorológicas de última hora apuntaban a un fin de semana con muy mal tiempo. Aún así desafiamos los pronósticos y salimos a fotografiar el otoño, y afortunadamente los dioses del cielo tuvieron piedad de nosotros y nos dejaron hacer.

Al caer la tarde las nubes bajaron a saludarnos. No sabíamos si acabaría lloviendo.


Dejen pasar

Uno de los méritos de las fotos que hice en Èze fue conseguir que no saliera nadie en ellas. Lo cierto es que es un lugar turístico, muy turístico, y en pleno agosto y con muy buen tiempo no había rincón donde no hubiera nadie. Tenía que tener la cámara preparada y ser muy observador para encontrar rincones solitarios, aunque sólo fuera durante un instante. Aún así, al final de este callejón estaba a punto de aparecer un turista en escena. ¡Dejen pasar!