domingo, 2 de diciembre de 2012

Mar de nubes

Y bajo esas aguas no se mueven peces, sino personas.


Suspiro

Más o menos a la mitad de la Via dell'amore, entre Riomaggiore y Manarola, el camino se cubre con una especie de porche y las parejas pueden compartir suspiros, y el Mediterráneo ser testigo.


Alimento

Siempre me llaman la atención las gárgolas al preguntarme qué inspiró a sus creadores a esculpir tan grotescas criaturas, y sobre todo las de forma humana como ésta del Palau del Lloctinent en Barcelona. Seguro que tiene un doble sentido.