La parte menos agradable de fotografiar amaneceres es hacerlo en fechas próximas al solsticio de verano, con lo que prácticamente no te queda tiempo para dormir esa noche, y más si te tienes que desplazar. Y peor aún es comprobar que tras variso días sin nubosidad y en pleno anticiclón, justo por el punto donde tiene que asomar el astro rey hay unas oscuras y opacas nubes bajas y sopla una brisa de moderada a casi fuerte intensidad que pone en dificultades la firmeza del trípode.
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Port del Fangar - Deltebre, Tarragona.
[EXIF]
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