Aunque parezca egipcio, este obelisco de la Piazza Navona de Roma es una copia encargada por Domiciano para el templo de Serapis. Luego fue trasladado al Circo de Majencio, y finalmente montado sobre la Fuente de los Cuatro Ríos de Bernini en 1651, donde sigue hasta la fecha. Una vida muy ajetreada.
La idea era un encuadre más diagonal para facilitar el juego de palabras, pero las nubes no me dejaron.
lunes, 22 de octubre de 2012
Agonalis
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